miércoles, 24 de febrero de 2016

CORNELIA PARKER (1956): LO QUE QUEDA DE UNA CASA (NEITHER FROM NOR TOWARDS, 1992)







La instalación Neither From Nor Towards, 1992, (Arts Council Collection, Hayward Gallery, London) de la artista británica Cornelia Parker (finalista del Premio Turner en 1997) expone ladrillos desgastados por el mar, convertidos en cantos rodados, lo único que quedó de una casa situada en lo alto de un acantilado derribado por la subida del mar.
Los pocos fragmentos que perduraron se disponen como si recrearan el plano de la casa y se alzan de los muertos y levitan, como una casa ideal o celestial, como una aparición luminosa
Una obra hermosa y patética (en el noble sentido de la palabra).

La obra se expone en este momento en la nueva sede del Museo del Louvre en Lens (Francia)

martes, 23 de febrero de 2016

MIQUEL BARCELÓ (1957): CERÁMICAS (2014)











Fotos: Tocho, 2015

La exposición que el Museo Nacional de Arte Catalán (MNAC) va a dedicar a la influencia del arte románico en el artista Pablo Picasso, en Barcelona, anunciada recientemente, que ubicará obras de Picasso entre piezas medievales, recuerda una propuesta del historiador de arte y galerista Artur Ramón: una exposición de Miquel Barceló en las salas de arte románico o gótico del MNAC destacando motivos y composiciones similares, pobladas de monstruos y demonios, que Barceló aceptó con entusiasmo, pero que el Museo no llevó a cabo.
Algunas de las obras de Barceló, inéditas creemos, serán finalmente incluidas en la exposición sobre Cerámica y Arquitectura que se inaugurará en el museo del Diseño de Barcelona en septiembre de este año.-

Agradecimientos a Miquel Barceló, María Hevia, Artur Ramón.

FÁTIMA MIRANDA (1952): ENTRE SALAMANCA Y SAMARKANDA (2013)




... a Fátima Miranda a quien próximamente se le dedicará una exposición en Madrid

Agradecimientos a la artista y a Concha Gómez

Véase la página web de la artista

YOKO ONO (1933): GREENFIELD MORNING I PUSH AN EMPTY BABY CARRIAGE ALL OVER THE CITY (1970)




Dados los parabienes que la artista japonesa-norteamericana Yoko Ono, de 83 años de edad, tras años de descrédito, pese a haber formado parte del grupo Fluxus -lo que contrastó con la equivocada reproducción en bronce de sus instalaciones y objetos efímeros- recibe hoy (conciertos y exposiciones antológicas), quizá sea oportuno recordar uno de sus primeras composiciones -con Ornette Coleman- denostada en su momento, y que parece anticiparse a....
(ver entrada siguiente)

lunes, 22 de febrero de 2016

WALERIAN BOROWCZYK (1923-2006) & JAN LENICA (1928-2001): DOM (CASA, 19568)

Los valores de la ciudad griega

"Para un polis [una ciudad-estado compuesta por una capital, ciudades secundarias, pueblos y haciendas, campos cultivados, y naturaleza salvaje] la concordia entre los ciudadanos era mucho más importante que la independencia; y eso se refleja claramente en la religión de las ciudades. En griego, independencia se decía "autonomia", la concordia "homonoia": la "autonomia" no fue nunca divinizada y no mereció nunca fiestas religiosas, mientras que la "homonoia" fue personalizada y elevada al rango de una diosa a la que se le rendía culto, sobre todo al final de la época clásica y en la época helenística [siglo IV aC]"

(Mogens H. Hansen: Polis. Une introduction à la cité grecque, Les Belles Lettres, Paris, 2008, p. 153)

La ciudad griega divinizó igualmente a la Dèmokratia, convertida en una diosa a la que los stratègoi (los estrategas o generales que en época clásica también eran políticos que governaban la ciudad-estado, como Pericles en Atenas) rendían culto anualmente.

¿Qué ha quedado de este saber hoy?

domingo, 21 de febrero de 2016

UMBERTO ECO (1932-2016) Y LA ARQUITECTURA

El deficiente desarrollo de la trama de la última novela de Eco, junto con sus textos ensayísticos y novelescos sobre culturas del pasado, no hace olvidar que Eco fue uno de los más agudos intérpretes de las formas modernas de vivir y de crear y el padre espiritual del filósofo y teórico de las artes Xavier Rubert de Ventós. Después de todo, la Edad Media, la época a la que dedicó más esfuerzo en ensayos y novelas, podría ser considerada semejante a la época contemporánea, en la que los signos y la manera de presentarse son un modo de ser, y sustituyen al ser.
Eco fue un profesor en la Escuela de Arquitectura de Florencia en la segunda mitad de los años sesenta.
La arquitectura constituía un desafío. Eco consideraba que si el arte consiste en la producción de objetos y acontecimientos cuya razón de ser reside en que existen para ser contemplados, la arquitectura (y el diseño industrial) no podían formar parte del mundo del arte, ya que la arquitectura produce objetos para ser usados, cuyo destino y sentido residen en su uso, y no para ser contemplados desde cierta distancia. Eco no aceptaba que las emociones que la vista de un edificio pudieran no solo influir en la manera de vivir sino ser incluso un modo de vivir; las vivencias que provocaban o evocaban no eran la vida verdadera. La arquitectura no era una imagen del mundo, sino un ente en el mundo y, por tanto, la relación que el ser humano podía y debía mantener, no podía ser la de la observación pasiva.
Eco no consideraba que las imágenes arquitectónicas, ya fueran composiciones musicales, poéticas, pintadas o fílmicas, pudieran ser arquitectura, ya que las imágenes de una vida mejor o distinta que suscitaban no reemplazaban la vida efectiva. La arquitectura existía para ser habitada y solo se podía habitar en un espacio construido. No parece que aceptara que las ensoñaciones que las imágenes suscitan son anticipaciones de modos de habitar o, mejor dicho, no consideraba que dichas ensoñaciones pudieran ser sustitutos efectivos del habitar efectivo. Las imágenes remitían a la realidad y permitían entenderla, no sustituirla.
Podemos estar de acuerdo o no con la visión de la arquitectura de Eco pero sus análisis son aun hoy insustituibles, porque hacen pensar. Polémicos y, por tanto, vitales.