jueves, 21 de julio de 2016

Golpe de estado

La situación empeoraba desde hacía dos años. El responsable había descubierto que el presidente cobraba pagos desmesurados a través de una empresa unipersonal. Las condiciones de trabajo de los trabajadores eran penosas. La tensión era máxima. El presidente intentó agredir al responsable acusándole de haberlo agredido.
Finalmente, el presidente despidió al responsable, provocando una protesta general de los trabajadores. Tuvo tres días para recoger sus cosas.
¿Estamos hablando del presidente turco?
El despido tuvo lugar el 18 de julio.
¿Una evocación de la situación política en España hace ochenta años?
No exactamente.
Los diseñadores gráficos e industriales, los arquitectos, directores de museos conocen quizá al director de la Escuela Eina, Oriol Pibernat. Tras el fallecimiento del pintor Ráfols Casamada, presidente del patronato de la fundación privada responsable de una de las mejores escuelas de diseño en España -y posiblemente en Europa-, hace años, esta escuela entró en decadencia, hasta la llegada del mejor teórico del diseño en España.
Lo que ha descubierto lo ha llevado a la calle.
Lo que supongo el presidente no se esperaba es la reacción del profesorado en defensa de su director.
En el sistema educativo aún caben reacciones nobles.

miércoles, 20 de julio de 2016

SID GROSSMAN (1913-1955): HARLEM (NUEVA YORK), O EL HOMBRE EN LA CIUDAD































Sid Grossman fue un fotógrafo urbano norteamericano o, más precisamente, "callejero". No fotografió monumentos, sino densas vistas urbanas,  compuestas por la estricta geometría horizontal, vertical y en diagonal de calles rectas y edificios cuyas fachadas estaban recorridas por el zigzag de las escaleras de incendios metálicas, en las que no se descubren plazas ni parques, y en las que se incrustan figuras, que andan o se detienen un momento ensimismadas, que parecen formar parte del entorno. Están tan integradas que no solo no se conciben fuera de estas calles sino que casi pasan desapercibidas. En algunas fotografías, casi todas tomadas en el barrio de Harlem en Nueva York, cuesta recordar si la calle está poblada de personas. Éstas no se relacionan entre si, pero tampoco parecen aisladas o abandonadas porque están integradas en en entorno construido que las acoge y las acompaña. La distancia que el fotógrafo establece con las figuras, pese a que manifiesta formar parte del mismo espacio urbano, ayuda a convertir a aquéllas en elementos necesarios, carnales, entre las piedras, el hierro y el asfalto.
Las Rencontres Photographiques en la ciudad francesa de Arles acogen la primera retrospectiva europea de este fotógrafo.

martes, 19 de julio de 2016

JOHN CUNNINGHAM (1969): HOMELESS HOUSE (EL HOGAR DE UN SIN-HOGAR, 1998)



Sobre este compositor e intérprete británico afincado en Francia, véase, por ejemplo, este enlace

THOMAS ADÈS (1971): LIEUX RETROUVÉS. IV: LA VILLE (LUGARES REENCONTRADOS. PARTE IV: LA CIUDAD, 2009)



Sobre este compositor británico, véase su página web

lunes, 18 de julio de 2016

HAROLD GILMAN (1876-1919): INTERIORES



















La próxima subasta, tras el verano, de la colección de arte del fallecido cantante David Bowie, ha revelado que, además de coleccionar nombres de artistas contemporáneos más o menos previsibles -Damian Hirst, Basquiat-, Bowie fue un sorprendente coleccionista de la obra -escasa- exquisita de un pintor británico poco conocido, Harold Gilman, prematuramente muerto a los cuarenta tres años, de fiebre española, justo al acabar la Primera Guerra Mundial.
Formado en España -pasaba meses en el Museo del Prado, estudiando a Velázquez, aunque acabó fascinado por los colores ácidos y antinaturalistas del manierista El Greco-, y en Escandinavia -la luz de los cuadros es nórdica-, la pintura de Gilman denota, en verdad, la influencia del pintor francés Vuillard y de los nabis, como Bonnard, en general.
Sus cuadros muestran escenas de interiores domésticos, sin nadie o con figuras mujeres, de servicio, necesariamente calladas, y niños-  casi integradas o fundidas con el entorno -porque son indispensables, y porque son como muebles, en los que nadie se fija-, casi como si no hicieran nada, leyeran o meditaran, figuras de gestos cotidianos invisibles. Figuras quietas como apariciones.

No sé si alguna institución española se ha interesado por este pintor, tan ligado a la pintura barroca española.

ALAN VEGA (1938-2016): FAT CITY (1996)



Los mayores quizá recuerden al grupo Suicide cuya aparición a finales de los años 70 sonó como una escalada desaforada y oportunista en las proclamas de No Hay Futuro.
Sin embargo, su fundador, aunque fuera pintor antes que músico, escribió e interpretó canciones como ésta.
Otro música que se ha ido.

viernes, 15 de julio de 2016