sábado, 12 de noviembre de 2022

YIN XIUZHEN (1963): CIUDADES PORTÁTILES (2001-2014)























 

Estoy haciendo la maleta. Mañana parto pronto. La ropa está colocada sobre la cama, ordenada, formando pilas, por tipos de prenda. Temo olvidarme algún elemento de vestir necesario, o no coger suficiente ropa, ni la más adecuada. Durante diez días deberé vivir -o convivir- con lo que la maleta contendrá.

Cuentan de una Reina que no podía viajar sin su almohada; y de un cantante que tenía una maleta llena sus toallas. Una viajera inglesa del siglo diecinueve por el desierto egipcio, a lomos de camello, se hacía acompañar de un baúl que contenía, como si de un sagrario se tratara, su juego de té habitual.

¿Caprichos de Reina, de aristócrata o de estrella, incapaz de abrirse al mundo y de olvidarse de sus fetiches y sus mediocres costumbres? 

Viajamos para conocer mundo, y dehydrated atrás problemas y vidas sin alicientes. Mas, un viaje no puede desentenderse de referencias conocidas ni llevarse a cabo sin algunos amuletos.

Las maletas devienen puertos conocidos en los que dejarse ir sin la tensión inevitable ante lo desconocido. 

Para la artista china Yin Ziuxhen , siempre a punto de emprender un vuelo de incierto retorno, su maleta es su casa, que alberga los objetos más conocidos que la arropen y la protegen. Una maleta es un mundo, el mundo de quien la acompaña: un hogar o una ciudad incluso, en la que ya no cabe perderse por un descuido, un olvido o la soberbia. Una maleta es un gesto de modestia, gracias al cual reconocemos que necesitamos, cuando nos alejemos, voluntariamente, de casa, de unos objetos preciados que nos acompañan en un viaje que podría ser el último.

En cada ciudad que se detiene , Yin Ziuxhen  pide a personas que encuentra si le pueden entregar ropa usada, ropa que han portado y porten habitualmente, la ropa con la que se presenten al mundo. Con las telas que prensa construye diminutos edificios que reproducen arquitecturas conocidas, pero también discretas, que dispone en un mismo modelo de maleta que dispone abierta, y que constituyen maquetas urbanas como las que podría componer un niño, reproducciones con materiales que guardan el recuerdo de sus usuarios y que constituyen paisajes urbanos en los que nadie se siente extraño. La maleta se convierte en una posesión que hace del viaje a una ciudad desconocida una experiencia menos desasosegada, haciendo de cada ciudad extraña un hogar poblado de vida.


https://www.pacegallery.com/artists/yin-xiuzhen/


 




jueves, 10 de noviembre de 2022

LUCHINO VISCONTI (1906-1976): MUERTE EN VENECIA (1971-1972)

DEATH IN VENICE from Mitch Corber on Vimeo.


Muerte en Venecia, de Visconti en 1971, y Gritos y susurros, de Bergman, un año más tarde, fueron las dos películas que abrieron la década de los setenta, constituyeron un cambio en la obra de ambos cineastas que alcanzaron, tras el éxito de crítica del que ya gozaban, éxito de público. Ambas películas, suntuosos y largos dramas con personajes interiormente torturados, abrieron puertas a la plasmación del mundo interior, donde el tenso silencio sustituyó al grito. 
Muerte en Venecia es una película ilustrativa del conflictivo concepto estético de belleza, atrapado entre las formas ideales, desencarnadas, a las que no se llega, altas y altivas, si no es a través de formas materiales débilmente luminosas (que pregonaba la estética neoplatónica, a la que sucedió la teología cristiana), un eco apagado de la lejana irradiación de la idea, y las formas terrenales, desinteresadas de las alturas, marcadas, insertas en el tiempo, en el mundo, hundidas en la materia, incluso en las profundidades. Dos estéticas antitéticas, dos concepciones de la belleza (occidental y oriental) entre las que se debate trágicamente el protagonista de la novela corta de Thomas Mann que alienta la película de Visconti -que cambió la profesión del protagonista, de escritor a compositor. 
Esta película, tan esclarecedora para tratar el tema de la belleza en la teoría del arte (aunque hoy se sabe de la soterrada violencia que ha marcado la vida del joven protagonista), se halla, por vez primera, gratuita y legalmente, en internet -aunque la calidad de la imagen no sea deslumbrante (pero sí lo es la música).

miércoles, 9 de noviembre de 2022

ZINEB SEDIRA (1963): CASA ENCANTADA (HAUNTED HOUSE, 2006) & ENCUADRANDO LA VISTA (FRAMING THE VIEW, 2008)












 
La fotógrafa franco-argelina Zineb Sedira, representante de Francia en la Bienal de Arte de Venecia de 2022, es conocida también por series fotográficas sobre los efectos de la colonización francesa de Argelia, y las trazas que han quedado : desde una imponente mansión abandonada, convertida en un hierático monumento agarrado ante el mar como una esfinge muda, hasta las ruinas de casas de colonos franceses, algunos nacidos en Argelia (una colonia con más de un siglo de antigüedad, abandonadas a toda prisa, cuando la Revolución, cuyos restos descarnados, a través de cuyas heridas se encuadra el mar inmutable, revelan que fueron construidas sobre previos hogares de habitantes nativos.





lunes, 7 de noviembre de 2022

Ruina

 “Ruine ne se dit que des palais, des tombeaux somptueux ou des monuments  publics. On ne dirait point ruine en parlant d'une maison particulière de paysans ou bourgeois; on dirait alors bâtiments ruinés.”

“Solo se emplea la palabra ruina para referirse a palacios, suntuosas tumbas o monumentos públicos. No emplearíamos nunca la palabra ruina refiriéndonos a una casa particular de unos campesinos o unos burgueses; se hablaría en estos casos de construcciones arruinadas”

(Louis de Jaucourt : “Ruine”, La Enciclopedia, o el Diccionario razonado de las ciencias, las artes y los oficios, 1765)

domingo, 6 de noviembre de 2022

HERBERT LIST (1903-1975): RUINAS CLÁSICAS (ATENAS Y ROMA, 1936-1937)






























 

Herbert List, el fotógrafo alemán, exiliado de la Alemania nazi por ser judío, de las ruinas de la Grecia antigua, del Acrópolis ateniense, en particular, ha caído en parte en el olvido.
Sus imágenes de ruinas clásicas, "mediterráneas", se centraron en la destrucción del tiempo y de la locura humana cuando retrató en 1946 las ruinas de los museos de antigüedades -ruinas de ruinas- de Munich, devastados por los bombardeos de la Segunda Guerra Mundial, convertidos en nuevas acrópolis, retratos ambiguos, que desvelan el horror y las fascinación por las ruinas, una destrucción que expone casi obscenamente realidades o aspectos de la realidad hasta entonces ocultos y que, sin embargo, pese o debido al estado ruinoso, suscitan una atención casi morbosa por restos en los que todavía se percibe un poderoso hálito de vida y se descubre la extensión de la pérdida, de lo que era o pudo haber sido, siempre magnificado por la imagen, como si las cosas son por lo que eran y ya no son.

REYNER BANHAM (1922-1988): LOS ANGELES (1972)



Uno de los más célebres documentales sobre una ciudad, en este caso, una ciudad que no lo es -o no lo era- pero que fascinó al crítico de la arquitectura británico Reyner Banham, defensor del brutalismo de los arquitectos Alison y Peter Smithson y de la arquitectura hecha de objetos banales (con los que el artista británico Richard Hamilton componía sus irónicas vistas de interiores modernos), más próxima al tenderete que al templo, años antes que el Pop Art se impusiera.