sábado, 13 de junio de 2015

MIQUEL BARCELÓ: CAPILLA DEL SANTÍSIMO (CATEDRAL DE PALMA DE MALLORCA, 2001-2006)


















































Fotos: Tocho, junio de 2015

El texto de la Biblia está estructurado como un juego de reflejos o de ecos. Todo está en todo. Acontecimientos del pasado son presentados como el anticipo de hecho futuros, mientras que lo que acontece en el presente se percibe como la rememoración, o la reactualización de acciones acaecidas en un tiempo muy anterior. Jonás engullido por una ballena antes de ser regurgitado en la playa tres días más tarde constituye una prefiguración de la agonía y la resurrección de Cristo, crucificado justo donde Adán fue enterrado, del mismo modo que las Bodas de Caná se anticipan a la Santa Cena.

Esta composición de motivos que se reflejan los unos en los otros es la que Miquel Barceló  conjugó en la Capilla del Santísimo en la Catedral de Palma. La obra, moldeada, grabada y pintada sobre grandes placas de terracota agrietadas, trabajadas y cocidas en Italia -cuyas grietas son el testimonio tanto de la tierra reseca, cuando de las oberturas por las que la vida sube-, está dedicada a la multiplicación de los panes y los peces que culminan las bodas de Caná.

Pero este hecho milagroso se articula con la Santa Cena, y la Pasión y Resurrección de Cristo, por un lado, y con el mito de la Creación por otro. La Capilla se convierte en una cueva, el antro de los orígenes. Los animales emergen del lodo. Se asoman al espacio. La tierra da frutos, los cuales fertilizan aquélla. Agua y tierra se separan. Las aguas se retiran. Las olas que baten se confunden con las plantas agitadas. Al fondo de la cueva, la divinidad emerge, transfigurada. asciende , no de una tumba, sino del sagrario -cubierto de pan de oro, fuente de luz, gracias al cual la muerte trasmuta-, que contiene el pan y el vino, producido en la cueva, que son la carne y la sangre de la divinidad. Ésta es un dios y un hombre -el propio artista, con el cuerpo cubierto de manchas albas-, pero también es un ser despellejado, ofrecido en sacrificio en rituales precolombinos. Asciende entre palmeras, cuyas palmas celebran su renacimiento. Sus heridas, en las manos, los pies y un costado, son las mismas que rajan a los peces cuando se les abre en canal: la imagen no es gratuita; el acrónimo de Cristo, en griego, significa pez, y los peces son el símbolo de Cristo, que Cristo multiplica, multiplicándose, ofreciéndose a todos los comensales, los comulgantes, de las bodas de Caná, y de las ceremonias durante las que los humanos se hacen con la carne, liberada de las aguas, y la sangre de la divinidad. Sobre la cueva, las vidrieras deberían dejar pasar la luz, pero son negras, nubladas, como si la vida se recogiera en la cueva, y no tuviera que trascender en las alturas: la vida se halla en la tierra donde la divinidad nació y se multiplicó. Las vidrieras están cubiertas de espinas -espinas de peces, y coronas de espinas- y de rayos que crepitan sobre un cielo de ceniza. La cueva es el mundo. La vida que se forma asciende desde el mundo de los muertos. Los panes alimenticios -que son la carne divina-, de cuarteada costra, y los mismos frutos abiertos -melones, granadas, racimos de uva incluso-  recuerdan las pulidas calaveras que los sustentan. Calaveras que se asemejan también a los fondos marinos cubiertos de conchas, y a las rocas batidas por las olas y horadadas -como los óculos cadavéricos- por una vida incipiente, y a las jarras henchidas, que recuerdan la tierra abombada, o un vientre grávido, de las bodas de Caná.

Una obra sugerente, que requiere, por desgracia, ser observada desde dentro, acceso vetado a los turistas.


Agradecimientos a Miquel Barceló, Maria Hevia, y la catedral de Palma de Mallorca
La filmación de la obra de Barceló en la Capilla  llevada a cabo por Marc Marín, se mostrará en la exposición sobre Cerámica y Arquitectura (en el Mediterráneo, desde Mesopotamia hasta nuestros días) que el Museo del Diseño de Barcelona prepara para septiembre de 2016.

viernes, 12 de junio de 2015

ORNETTE COLEMAN (1930-2015): HOUSE OF STAINED GLASS (1996)




 In memoriam....
Aunque Coleman no toque el saxo en esta interpretación, la composición es suya

miércoles, 10 de junio de 2015

PEDRO AZARA, VICTORIA GARRIGA, JUAN FORASTER, LUIS ÁLVAREZ, HELENA DE MIQUEL, JORGE ROVIRA: EN LA CIUDAD DE LOS TIEMPOS LEJANOS (ANTES DEL DILUVIO, CAIXAFORUM, MADRID Y BARCELONA, 2012)



Con motivo de la exposición sobre arte sumerio Antes del diluvio. Mesopotamia 3500-2100 aC, que Caixaforum presentó en Barcelona y Madrid en 2012, se realizó un dibujo animado, para niños (y para los padres), que contara un mito sumerio de creación del universo. Los dibujos fueron obra de Juan Foraster, de siete años.

Este animación (en catalán y castellano), mostrada solo en la exposición, fue realizada por:

Victoria Garriga (idea, composición, dirección), Juan Foraster (dibujos), Pedro Azara (texto), Luis Álvarez (animación), Helena de Miquel (locución), Jorge Rovira (música), Eric Rovira (canto), Jordi Colomé (grabación).
Producción: Fundación "la Caixa", y el equipo antes citado.
Agradecimientos a Albert Imperial, y a Concha Gómez.

EVOL (1972): EDIFICIOS (BUILDINGS, 2003-2015)





































El "grafitero" berlinés, conocido como EVOL, expone en estos momentos en una muestra colectiva sobre y en los subterráneos del Palais de Tokio de París.
Este artista es conocido por sus cuidadosos dibujos pintados de fachadas, inspiradas en los bloques de viviendas de hormigón en el antiguo Berlín Este (en concreto en la sede de la Stasi, la policía secreta de la Alemania del Este), sobre papel (o cartón de embalaje), que adhiere a toda clase de volúmenes urbanos: cubos de basura, "containers", mojones, cajas de electricidad, muros, así como cimientos de edificios (así en Dresde), etc.
Una segunda ciudad, diminuta a veces, se inserta en la trama urbana. Las imágenes que el muro de Berlín suscitaban -o suscitan aún- no están lejos. Los valores de los altos muros -separación, segregación, aislamiento, encierro- que "compartimentan" el espacio, y parten las ciudades, se reflejan en estos bloques o esas fachadas, uniformemente grises, en los que no se refleja vida alguna -pese a que sin duda no están abandonados.
Una inquietante mirada sobre la vida urbana.

ELY DAGHER (1985): BEIRUT (بيروت, 2007)


BEIRUT - بيروت from Beaverandbeaver on Vimeo.

Ely Dagher, artista libanés formado en la prestigiosa escuela de arte Goldsmiths College de la Universidad de Londres, acaba de ganar la Palma de Oro de cortometrajes de animación en el último festival de cine de Cannes (Francia).
Éste es su primer y celebrado primer cortometraje que, al igual que el segundo, está dedicado a la compleja relación del autor con su ciudad natal, Beirut.