lunes, 27 de marzo de 2017
ALICE GUY BLANCHÉ (1873-1968): ESPAGNE (ESPAÑA, 1905)
La figura y la obra de Alice Guy Blaché, la primera cineasta de películas no solo documentales como los Hermanos Lumière -Blaché se anticipó al trabajo de los hermanos Lumière-, sino de ficción, está siendo reivindicada, pese a la pérdida de una gran parte de sus mil filmaciones, debido a que fue voluntariamente relegada y olvidada. Sus películas fueron atribuidas a su esposo, un cámara.
Fue también una de las primeras documentalistas de la vida en la España de principios del siglo XX (como en Madrid, por ejemplo) -donde vino para rodar películas de ficción.
THÉO GUIGNARD (¿1990?): LABYRINTHES (LABERINTOS, 2015)
Libro ilustrado por el dibujante y animador francés Guignard, con dieciséis laberintos, de estilos, imágenes y significados distintos, desde los más sencillos hasta los más intrincados, que ofrecen una imagen, irónica o crítica en ocasiones del espacio y la vida modernos. Esos laberintos no son siempre fantasiosos o inventados sino que están, sin deformaciones, tomados de la realidad. Un libro excelente donde perderse.
viernes, 24 de marzo de 2017
PAOLO WOODS (1970) & GABRIELE GALIMBERTI (1977): HEAVEN (PARADIS, PARAISO, 2015-2017)
Los fotógrafos canadiense-holandés, asentado en Haití, cerca de las Islas Caimán, Paolo Woods, e italiano Gabriele Galimberti, publicaron un libro fotográfico, titulado Paraíso, con una portada oportunamente celeste, con imágenes de un tipo de paraíso. Retratan, a todo color, cajas fuertes, subidones, figuras a contraluz que negocian, y gaviotas que son aves carroñeras en playas prístinas. Abrieron un oficina llamada Heaven en las Islas Caimán y desde allí tuvieron acceso a modos de vida y financieros que se practican en lugares apartados -para el común de los morales-, pero a la luz del día. Personajes tranquilos en salas con vistas -desde muy arriba- o estancias que parecen tener historia e infunden respeto.
La serie fotográfica, que sigue activa, se mostró por vez primera en los Encuentros Fotográficos de Artes en 2015. Hoy se expone en la Universidad Paris II-Panthéon Assas en Paris.
LAS BISTECS: HDA (HISTORIA DEL ARTE, 2016)
Agradecimientos a Marc Marín por este envío fun damen tal, y a Albert García Alzorriz por explicar que este vídeo pertenece al movimiento posinternet. Internet no tiene veinte años, pero ya estamos en esta fase; o ya no...
miércoles, 22 de marzo de 2017
MICHAEL RAKOWITZ (1973): LAMASSU (THE INVISIBLE ENEMY SHOULD NOT EXIST, LONDRES, 2017)
Michael Rakowitz es un artista norteamericano, de padres iraquíes, que vive en Chicago. Una gran parte de su obra se refiere a la destrucción del patrimonio iraquí.
Así, una "performance", que tuvo lugar en el Museo Guggenheim de Nueva York, consistió en un banquete con manjares iraquíes cocinados por el propio artista. El precio del convite era muy elevado. Cuando los encopetados asistentes supieron que los platos en los que comían -que el artista adquirió en subastas por internet- habían formado parte de la vajilla que utilizaba el ejecutado presidente de Iraq, Saddam Hussein, se atragantaron. Varios partieron entre mareados e indignados.
La serie escultórica El enemigo invisible no debería existir, que realiza desde 2007, consiste en reproducciones, realizadas con materiales procedentes de envoltorios de productos de uso diario económicos en venta en comercios en Iraq, que acaban en la basura -latas, cartones, plásticos-, de obras del Museo Nacional de Iraq en Bagdad desaparecidas -robadas o destruidas tras el ataque del Museo por parte de iraquíes hambrientos y saqueadores, con el permiso implícito de los soldados norteamericanos que no defendieron el museo.
Este año, Rakowitz va a realizar reproducciones a gran escala de los toros alados neo-asirios destruidos por el ISIL en Nínive, cabe Mosul.
Por unos meses, las estatuas destruidas renacerán, en colores chillones y en materiales sin valor alguno, como una metáfora de la pérdida de las obras y de los valores.
Estas esculturas, realizadas igualmente con materiales de deshecho -lo que se tira construye lo que se derriba-, se colocarán en dos grandes peanas de la plaza Trafalgar de Londres, frente a la Galería Nacional. Éstas fueron concebidas en el siglo XIX para estatuas reales ecuestres que nunca se materializaron, y sirven, desde el siglo XXI, para exponer obras contemporáneas creadas para la ocasión, que configuran una lectura del mundo actual -como lo constituían las estatuas que alababan el poder real.
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Arqueologia y arte moderno,
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