viernes, 16 de septiembre de 2011

Mircea Cantor (1977): Monument for the End of the World (2006)

Mircea Cantor (1977): Tracking Happiness (2009)



Sobre Mircea Cantor (candidato al Premio Marcel Duchamp, 2011), véase: http://www.mirceacantor.ro/

Tracking Happiness es uno de las video-instalaciones mas conocidas realizadas en los últimos años. Mostrada reiteradamente en museos y festivales: un corro de mujeres que barren (que buscan o que dispersan) incesantemente, la mirada gacha, dando vueltas sobre sí mismas

Joëlle Bouvier (1959) & Régis Obadia (1958): La chambre (la habitación) (1988)



Una pieza ya clásica sobre el espacio interior, doméstico, vivido, que la danza construye y descubre.

Sobre la compañía dedanza de Régis Obadia: http://www.regisobadia.com/

Sobre la companía dedanza de Joëllle Bouvier: http://joellebouvier.com/public/

Espacio público

Los ayuntamientos de Badalona y Salt, respectivamente, han suprimido bancos (o los han reemplazado por asientos sin dosel, o individuales) y cerrado fuentes de espacios públicos para evitar que personas se estiren a lo largo y duerman en los bancos, o vayan a la fuente a coger el agua corriente de la que no disponen en casa. Hasta llenan garrafas, se comenta. Del mismo modo, Barcelona modifica plazas públicas, suprimiendo escaleras y desniveles y reemplazándolos por rampas: de este modo, se dificulta que la gente se siente más o menos cómodamente en la plaza
Las medidas son más que razonables; incluso, muy comedidas, escasas. En verdad, se podrían llevar a cabo unas cuantas más: por ejemplo, la supresión de pavimentos y duros y su sustitución por suelos embarrados, por no hablar de la supresión del espacio público: plazas e incluso calles, utilizándolos como espacios edificables. Se evitaría cualquier apropiación, porque no habría nada de que apropiarse. Se podría también pensar en la construcción de pasos subterráneos, túneles, etc., de modo que se evite la desagradable presencia de viandantes al exterior.
Acertademente, ningún partido político, ninguna institución pública o cultural se han soliviantado. No se ha protestado porque esas medidas pudieran implicar el cruce de "una línea roja", ni que se degradara la imagen de las ciudades o de Cataluña.
Se trata, en fin, de pobres: negros, marroquíes, incluso rumanos y gente de mal vivir. No son como nosotros, no han brotado de la tierra, no tienen raíces. ¿Por qué habría que dejarles que se asienten?
Somos cristianos y sabemos qué papel juegan las fuentes en las ciudades: se montan corrillos, acuden las mujeres y llega siempre un salvador.  Las fuentes, son un peligro público, por no hablar de los bancos (para descansar, una actividad impropia de la gente de bien).
Todo es perfecto. Se toman medidas adecuadas y no decimos nada. Es que no va con nosotros. Para los demás, ni agua.

miércoles, 14 de septiembre de 2011

Casa anheladas: Ceremonia en honor de Nuestra Señora de Nazaret, Belem (Brasil)




Fotos: Artur Simoes, Brasil


Inspirado en una exposición, titulada Casas del alma, que el Centro de Cultura Contemporánea de Barcelona (CCCB) organizó, en 1997, sobre el simbolismo de unos modestos objetos votivos de la Antigüedad, que representaban el hogar del difunto o del fiel, utilizados en ceremonias de carácter funerario o religioso, el doctor Artur Simoes, profesor de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad de Sao Paolo (Brasil), estudia desde hace años un curioso ritual en honor de Nuestra Señora de Nazaret, que se llera a cabo en Belém (Brasil), durante el mes de Octubre.
Esta procesión, de origen europeo, sin duda medieval, consiste en llevar ante la imagen de la Virgen la maqueta de la casa soñada, el hogar que el devoto quiere construir. El fiel porta la maqueta sobre la cabeza: aquélla le cubre: ya cumple la función de un hogar: cuida, e identifica a quien se pone bajo su techo -dando sentido a su vida. Ya no es un sin-hogar, un desarraigado.
La maqueta constituye un amuleto contra la mala suerte; conjura el que la casa no llegue a ser construida; pero también actúa como un verdadero modelo: de algún modo, ya realiza el sueño del fiel: la casa a la que aspira ya se materializa, ya que la "divinidad" acepta que la maqueta le sea mostrada. Por el hecho que los ojos de la "divinidad" se posan sobre el objeto, éste cobra existencia, se anima. El fiel se asegura la pronta construcción de aquélla.

D.A. Pennebaker (1925): Daybreak Express (1953)

martes, 13 de septiembre de 2011