martes, 5 de julio de 2022
CASA TOSQUELLA (BARCELONA, 1905)
lunes, 4 de julio de 2022
FAUSTO ROMITELLI (1963-2004): THE NAMELESS CITY (LA CIUDAD SIN NOMBRE, 1997)
domingo, 3 de julio de 2022
(Ordenación del espacio), o Escuadra Óptica de Agrimensor Romana (s. III dC)
Foto: Tocho, julio de 2022
La monumental exposición sobre Roma que presenta el museo del Louvre en la ciudad francesa norteña de Lens, muestra un objeto de arquitecto o constructor Romano, que aún se utiliza hoy para trazar límites en un terreno, un objeto metálico común y sin embargo singular, pues se conservan muy pocos ejemplares tan antiguas y en tan bien estado.
Hincado en la parte superior de un palo plantado verticalmente en el suelo, permite trazar visualmente líneas perpendiculares u orientadas según ciertos ángulos gracias a la estrecha franja de luz que se filtra a través de dos rajas opuestas abiertas en el contorno de la escuadra óptica.
Es gracias a este ingenioso útil que Roma pudo urbanizar a Europa, el norte de África y todo el Próximo Oriente. Un pequeño objeto modeló el mundo conocido y determinó los modos de vida y los valores (urbanos) que rigieron las comunidades.
Las líneas rectas que se trazaban con la escuadra óptica tenían su proyección en la valoración -la necesidad, la legalidad- de estos gestos con los que se encuadraba la vida en sociedad.
https://www.louvrelens.fr/exhibition/rome/
sábado, 2 de julio de 2022
CONSTANTIN BRANCUSI (1876-1957): TALLER (PARIS), O TEMPLO DE LA LIBERACIÓN (1933)
PABLO RUIZ PICASSO (1881-1973): LA VENUS DEL GAS (1945)
Fotos: Tocho, Museo Picasso, París
Una hermosa exposición sobre Maya, la primera hija de Picasso, en el museo Picasso de París, hoy, incluye una estatuilla antropomórfica que podría pasar desapercibida. Negruzca, esquemática, recuerda obviamente una figura paleolítica o neolítica, si no fuera por el material (hierro oxidado): un cuerpo femenino ancho, abombado, grávido, con un hijo en el interior del vientre, asaetado de innumerables pechos como la Diana de Éfeso, hierática, firme sobre piernas y pies gruesos como columnas, que contrastan con una cabeza triangular diminuta y un largo y esbelto cuello ligeramente curvado hacia adelante. El porte es seguro y sereno. La figura, a contraluz, como una negra aparición, es hipnótica y atrae las miradas irresistiblemente. No, no es cierto, no pasa desapercibida.
Esta nueva incursión de Picasso en el arte primitivo enlaza con la influencia del arte románico, ibérico y de culturas africanas en la figuración de Picasso y el nacimiento del cubismo; también entronca con las obras que adquiría.
Un detalle, sin embargo: la estatuilla no ha sido moldeada por Picasso. Se trata de un banal quemador de gas de hornillo, ennegrecido por el uso continuado, un modesto útil, siempre indistinguible, dispuesto verticalmente en la peana, que nuestra mirada , a través de la aguda disposición de Picasso, confunde o lee con y como una estatuilla divina.
El museo, astuta, cruelmente, ha situado la escultura Fuente, un urinario, presentado horizontalmente, de Marcel Duchamp, junto a la Venus del gas . Dos mismas maneras de dar la vuelta a un objeto de uso. Nunca la abismal diferencia entre lo gracioso y la gracia ha sido tan evidente.
https://www.museepicassoparis.fr/fr/expositions-en-cours