martes, 11 de octubre de 2016

A la caza del pasado

¿Puede existir un yacimiento arqueológico más instructivo que Pompeya?
Según algunos estudiosos, sí. No se trata de un lugar particularmente espectacular pero sí brinda una información decisiva sobre el procesa de "neolitización" -la transición del paleolítico al neolítico, caracterizado por la sedentarización humana y la fundación de los primeros asentamientos permanentes, la ganadería y la agricultura- de la Península ibérica y, en general de la Europa Occidental.
En verdad: brindaba.
Los útiles y los restos orgánicos que la cueva de Chaves, en Aragón -un Atapuerca neolítico-, atesoraba, solo fueron estudiados en un diez por ciento antes de su destrucción intencionada.
¿Cómo? Mediante una sencilla excavadora.
¿Por una célula del Estado Islámico? No, ordenada por el propietario de la mayoría de las minas del norte de España, cuyos "negocios", detallados en cualquier página de internet, ponen los pelos de punta.
¿La razón? Muy sencilla. Era "necesario" construir un abrevadero precisamente en este lugar. La cueva se hallaba en una propiedad suya, convertida en coto de caza, por el que suelen pasar políticos y empresarios de la región, y el trabajo de los arqueólogos y la práctica caza no son excesivamente compatibles.
La cueva, la más importante de España, no fue declarada Patrimonio Nacional o Regional, y la Junta de Aragón -miembros de la misma habrían acudido a esta finca "alguna" vez- no se ha personado en el juicio que se lleva a cabo por la destrucción de lo u es, en verdad, un patrimonio de la humanidad.
El juicio se tiene que fallar próximamente.

Agradecimientos a Carlos Bitrian, personado en la causa, por estos datos.

3 comentarios:

  1. Recuerdo haber leído lo de esta cueva.Me salen los peores instintos cuando lo pienso.En este país seguimos siendo unos bárbaros de los de verdad.Espero que de verdad vaya a la carcel y sirva de aviso a otros desalmados

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  2. Claro,que el delito de verdad es el de la Junta

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    1. Espero que la carcel sea el destino de quién ordenó semejante delito, pero no acabo de tener confianza
      Un atento saludo

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