sábado, 21 de enero de 2023

Bagdad 2023

































Fotos: Tocho, enero de 2023


Los tremendos muros Texas de hormigón, que troceaban la ciudad a la que debían protegen, han desaparecido casi totalmente -son residuales- desde el año pasado, aunque tanquetas, vehículos militares, y soldados armados siguen patrullando. El Estado Islámico es aún  latente y la municipalidad tiene miedo de posibles atentados.

La ciudad está más dejada que nunca, los cables enlutan calles y fachadas, basuras y polvo se acumulan, las aceras y las obras están a medio construir y ya se encuentran abandonadas o en ruinas, pero la urbe presenta una vitalidad casi inconcebible, con vendedores callejeros, puestos de todo tipo de artículos, tiendas repletas de productos venidos de China, y una multitud de vendedores, transportistas, ciudadanos que se apresuran, y un tráfico monolítico que bloque todas las calles durante horas en medio del bullicio, el ruido de los generadores (Bagdad sigue careciendo de electricidad continua), y la polución que el tráfico infernal levanta, y que contrasta con el lento discurrir del río Tigris, en cuyas orillas pequeños grupos descansan, y con el silencio imponente en los jardines de los edificios del periodo otomano, cabe el río también, apenas se cruza el umbral en los gruesos muros que los rodean.

Más que nunca Bagdad es una sucesión de contrastes irritantes y fascinantes a la vez, en la que el dinamismo atempera el desaliño general. 


 

2 comentarios:

  1. Fascinante el edificio con soportales, un elemento que creíamos tan exclusivo de la Castilla profunda. ¿Puede deberse en Bagdad a esa tradición otomana?

    ¿Existe algo de turismo en Bagdad o todavía es territorio peligroso, tanto para propios como para ajenos?

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Los soportales de la calle al-Rasheed se inspiran de los de la calle Rivoli en París. La calle al Rasheed fue la primera intervención urbanística unitaria en Bagdad en el siglo XX, a principios del siglo XX.

      No ha turismo no religioso en Bagdad, si bien nos hemos encontrado con una pareja de españoles por su cuenta un un grupo de turistas españoles y portugueses.
      Los únicos por ahora
      Bagdad es segura aunque se recomienda no dirigirse al sur por carretera.
      Los controles siguen, así como las tanquetas y los guardias armados, aunque los muros de hormigón son ya casi cosa del pasado -aunque se encuentran.

      Eliminar