Fotos: Tocho, Cambridge, Mass., noviembre de 2024
La Capilla del Instituto Tecnológico de Massachusetts, de Saarinen, se compone de un cilindro de ladrillos, en el centro de un estanque circular, coronado con una apertura cenital, de la que desciende una escultura en cascada que refleja la luz.
Templo más que iglesia, apta para todos los cultos, no presenta ningún signo distintivo que la asocie a un culto determinado. El mismo altar es un paralelepípedo de mármol.
Templo, auditorio, sala de conciertos -posee un órgano, y campanas añadidas posteriormente-, destaca en una amplia esplanada de césped, contra unos árboles de hoja caduca que lo aíslan de la calle.
Butacas de madera, dispersas por el prado, que se pueden desplazar, invitan a recogerse ante este volumen perfecto -que asume cierta voluntaria imperfección terrenal por los ladrillos intencionadamente rugosos.
Una de las más hermosas capillas del siglo XX