Mostrando entradas con la etiqueta Mito y arquitectura. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Mito y arquitectura. Mostrar todas las entradas

martes, 19 de marzo de 2024

Esconjuradero

 


























La construcción es de planta cuadrada, orientada a los puntos cardinales. El volumen, un cubo coronado por un tejado a cuatro aguas. Los muros gruesos de piedra, con estrechas oberturas verticales terminadas con un arco de medio punto. Las paredes interiores albergan hornacinas en las que se ofrendan ocasionalmente velas.. Son los únicos elementos vagamente decorativos, junto con una cruz ocasional. La sobriedad, la dureza es de rigor, junto con la precisión geométrica y constructiva. En algún caso, un soporte cúbico también levantado con sillares se ubica en el centro del edificio cuyo techo se cubre con una bóveda levantada con hileras de lastras de piedra. El espacio puede acoger tres o cuatro personas.

Pero solo acoge uno: el sacerdote que con invocaciones trata de anular los conjuros lanzados sobre la comarca, y apartar las tormentas, azuzadas por el diablo, que asolan los cultivos.

Los esconjuraderos son un tipo de construcciones tradicionales de los Pirineos aragoneses, aunque se encuentran también en menor medida en Castilla y León y en Cataluña . Construidos entre los siglos XVI y XVIII, en altozanos, en ocasiones cabe las iglesias: tienen como función desactivar maldiciones. Eran espacios sagrados en relación con el maligno. Dominaban el territorio. Su función mágica se reforzaba con los conjuradores, pequeños volúmenes, dotados de un balcón, ubicados en lo alto de los campanarios, desde los que el conjurador -una función eclesiástica- concluía la purificación de los campos ahuyentando a Satanas. El edificio no pretendía ser amable. Su hieratismo, su firmeza permitía encajar los envites del mal.

Todo el alto Aragón está salpicado por estos edificios que se han conservado en buen estado aunque suelen estar en desuso. A veces se desearía que se edificasen hoy  nuevos enconjuaderos en el centro de algunas ciudades españolas. Quizá escampasen los nubarrones.


Agradezco la información al doctorando en arquitectura Gerard Romeu, cuya tesis doctoral versa sobre los símbolos profilácticos en la arquitectura popular aragonesa, co-dirigida por el profesor doctor Carlos Bitrian, experto en arquitectura popular aragonesa. 

La tesina de Romeu ya desarrollaba este tema y recibió el premio AJAC de ensayo en 2023.

lunes, 10 de julio de 2023

ELTON JOHN (1947): BABEL TOWER (LA TORRE DE BABEL, 1975)

 

 Ahora que Elton John se retira definitivamente de los escenarios y quizá de la composición), quizá se podría recuperar esta canción poco conocida -aunque no la más memorable-, de sus mejores años (los ya algo lejanos años setenta)

La torre de Babel, una obra ejemplar

La conocida concepción bíblica de la mítica torre de Babel la presenta como una obra fruto de la soberbia humana que pretende alcanzar el cielo y ver la cara de quien se esconde, castigada con la dispersión de los seres humanos y la multiplicación de las lenguas. Esta concepción es la que ha imperado hasta hoy (véase la ¡canción de Elton John en la siguiente entrada!), y así ha sido retratada en innumerables ilustraciones desde la Edad Media.

Sin embargo, la Torre de Babel también ha sido considerada no como la causa de la multiplicación de las lenguas y un símbolo, por tanto, de la incomprensión entre los humanos sino, muy por el contrario. como el signo de la recuperación de una lengua común, y, por tanto, del diálogo interrumpido.

En efecto, el Auraicept na n- Éces es un tratado islandés sobre la poesía, redactado en el siglo VII -con añadidos medievales. Este texto, colectivo, anónimo,  atribuido a un legendario monje llamado Longarad, escrito en gaélico, cuenta que un mítico rey de Escitia, llamado Fenius Farsaidh, compuso una lengua perfecta a partir de las mejores soluciones gramaticales de setenta y dos lenguas antiguas, desde el Egipcio hasta la lengua de los Bramanes, y esta lengua fue el gaélico.

La manera que el rey utilizó para componer esta lengua  perfecta -y, por tanto, divina- se inspiró en la técnica constructiva de la Torre de Babel, nombraba en el tratado como la Torre, la Torre de Nimrod (Nimrod fue el mítico constructor de la misma), o la Torre de los Hijos de Adán. Así, Nimrod solo empleó nueve materiales, a saber, agua y arcilla, lana y sangre, madera y cal, acacias, cuerda encerada, y alquitrán. De manera semejante, Fenius, a partir de las enseñanzas de veinticinco sabios, entre éstos, uno llamado Babel, enseñanzas que aprendieron, dispersos entre los suyos durante siete años y que expusieron y comunicaron durante tres más, armó la composición de la frase ideal a partir de nombres, pronombres, verbos, adverbios, participios, conjunciones, preposiciones e interjecciones pertenecientes a las mejores lenguas.

De este modo, el galaico, de algún modo, se convertía en la lengua de Dios, con la que nombrar y conocer todas las cosas, una lengua esclarecedora, capaz de conjurar y convocar el mundo, del mismo modo que la torre de Babel, levantada con los mejores materiales se configuró como una imagen del mundo perfectamente construido, la obra ejemplar.


Véase una edición bilingüe -gaélico e inglés- del tratado en:  en https://archive.org/details/auraicept00calduoft/page/26/mode/2up?view=theater

Umberto Eco escribió sobre dicho tratado en La búsqueda de la lengua perfecta en la cultura europea, que se puede encontrar en:

chrome-extension://efaidnbmnnnibpcajpcglclefindmkaj/https://ruc.udc.es/dspace/bitstream/handle/2183/8621/CC081art5ocr.pdf

lunes, 3 de julio de 2023

Babel en Barcelona



















Fotos: Tochoocho, julio de 2023, a imagen de las fotografías de Marc Marín


 ¿Babel en Barcelona?

El arquitecto Marc Marín (UPenn University, Filadelfia), a quien agradecemos la información, nos recordó ayer que la torre por el aquel entonces llamada Induban (Banco Industrial, hoy desaparecido), y hoy torre Maciá, construida en la plaza Maciá y anteriormente Calvo Sotelo, por el arquitecto José María Soteras (1917-1989) en 1970, una de las cinco torras más altas de Barcelona -y más denostada-, cubierta por vidrios anaranjados, presenta en la base de dos pilastras negras que flanquean la entrada del edificio, dos relieves en negativo monumentales del escultor José María Subirachs (1927-2014), encargado entonces de la mayoría de la estatuaria decorativa bancaria e institucional. Uno de los relieves, de grandes dimensiones, titulado Comunicación, muestra a una pareja desnuda, seguramente Adán y Eva, coronada por todas las letras del alfabeto latino, el cual a su vez soporta una imagen de la Torre de Babel, representada según la iconografía más habitual del siglo XVI, que remite a la misma torre Induban, y simboliza la pérdida de la comunicación debido a la multiplicación de las lenguas, según cuenta el mito bíblico. Éste mismo, que advierte de la ambición humana, no dejaba de designar a la excesiva altura de la torre Induban, que rompe con la relativa armonía de la plaza circular agresivamente amenazaba por aquélla y su estilo .

 Un relieve interior, que representa el laberinto cretense, tal como aparece en monedas griegas, del mismo Subirachs, parece aludir al caos visual que la torre introduce.


PS: Subirachs es también el autor de un texto sobre la torre de Babel publicado en 1989.

martes, 20 de junio de 2023

BABILONIAMANÍA. PAULINE KRIER (1992) Y LOS JARDINES COLGANTES DE BABILONIA (2016)





 

Comparada con la Egiptomanía, desatada a raíz del descubrimiento de la tumba casi inviolada del faraón Tutankhamon, incluso con la Asiriomanía, que la llegada de las primeras estatuas neo-asirias, extraídas de lo que por él aquel entonces, en la primera mitad del siglo XIX, formaba parte del imperio otomano y hoy se localiza en el norte de Iraq, por las primeras misiones militares y arqueológicas francesas y británicas, a los grandes museos europeos, la Babiloniamanía constituye un género menor, pese a la fascinación que el mito bíblico de la Torre de Babel suscita desde la Edad Media, tantas veces representada como denuncia de la ambición o vanidad humana, así como de la misma ciudad de Babilonia, una urbe maldita, que ha servido, hasta hoy, como referente comparativo para denostar a las metrópolis, desde la Roma papal hasta Nueva York, o figuras legendarias como la inquietante reina Semiramis, legendaria fundadora de Babilonia, a quien tantas tragedias y óperas se le han dedicado desde el Barroco.

Un reciente ejemplo de la inagotable presencia de Babilonia en el imaginario occidental, en concreto de sus (inexistentes) fabulosos jardines colgantes, en un medio insólito como es el diseño de mobiliario, se encuentra en los cuatro taburetes, uno para cada estación, de contundente arquitectura, titulados con el nombre del emperador babilónico Nabucodonosor II, que la diseñadora francesa Pauline Krier concibió y ejecutó, en una edición única, bajo los cuales cuelgan delicados jardines móviles….


https://www.paulinekrier.com/project-02





miércoles, 1 de febrero de 2023

El laberinto de Córdoba (s. XVI)







Fotos: Tocho, febrero de 2023

El (muy modesto) museo de Bellas Artes de Córdoba se encuentra en un edificio del siglo XVI, el Hospital de la Caridad de Nuestro Señor Jesucristo.
Lo más destacable son unos “grafitis” del siglo XVI, de trazo negro, únicos: un motivo recurrente en la historia, en diversas culturas, y sin embargo singular. Nunca se ha hallado en un contexto similar. 
Encontrados, durante una restauración del núcleo de la escalera principal, noble, hace veinte años, representan un laberinto cuya imagen se repite en diversas zonas de las paredes de la escalera. Trazados con mano torpe pero siguiendo un modelo muy conocido, que remite a grabados en monedas cretenses de época griega, su presencia podría tener sentido en un hospital renacentista, en el que la mortandad debía ser elevada. El laberinto simbolizaba el errático, dificultoso, incierto peregrinaje a Tierra Santa, cuyo viaje redimía de los males, un viaje real o espiritual, que se emprendía resiguiendo con la mirada y la imaginación las circunvalaciones del trazado. La posible remisión mágica de los males suplía quizá la escasez de resultados positivos de los tratamientos médicos.





martes, 27 de diciembre de 2022

EMILY ALLCHURCH (1974): CAPRICHOS ARQUITECTÓNICOS Y LA TORRE DE BABEL (2003-2017)



















 

A partir del género pictórico menor occidental del capricho arquitectónico, aparecido a partir de finales del siglo XVI, en Italia, especialmente , y de la iconografía manierista y barroca protestante de la Torre de Babel (como símbolo del poder papal católico), la artista británica contemporánea Emily Allchurch, a partir de fragmentos fotográficos de centenares de edificios modernos, que combina en una composición imposible, recrea la imagen de la mítica Torre de Babel que se impuso en el siglo XVI: un edificio solitario, que empequeñece el entorno, aislado e inacabado, que ocupa toda la composición, a veces por encima de las nubes, como bien se narra en el Génesis.
Los “collages” de Allchurch ponen el acento en el carácter ilusorio o imposible de la torre , lo que acentúa su relación con el sueño: una construcción que solo tiene entidad en el mundo imaginario, una obra que, hoy, ya no sorprende y que debe retrotraerse al mundo fantástico para seguir manteniendo cierto misterio.

Sobre esta artista, véase, por ejemplo, su página web: