sábado, 23 de agosto de 2025

FRANCISCO DE GOYA (1746-1828): LA CONSTRUCCIÓN DE UNA TORRE (O: LA DEPOSICIÓN DE UN SILLAR, 1787) & LA PIRÁMIDE (1800)






 

Espléndido y poco conocido cuadro de Goya, de gran tamaño, que muestra la construcción de una torre, entre andamios de madera, detenida por la retirada de un obrero que se encuentra mal, y dibujo de una pirámide o un arco de triunfo piramidal, que rivaliza con los proyectos utópicos de los arquitectos franceses del Siglo de las Luces (y de las Sombras, por el bienio del Terror).
En ambos casos, se trata de construcciones descomunales ante las cuales los humanos somos hormigas indistinguibles.


La figura postrada, asediada por una pesadilla de monstruos mientras dormita sentado, la cabeza apoyada sobre los brazos que descansan sobre un gran cubo -una figura geométrica perfecta que contrasta con los monstruos informes que lo acechan mientras no razona- estaba dibujando. La parte superior de su cuerpo cubre parcialmente un útil de dibujo y un papel. Se adivina que estaba proyectando un edificio gigantesco delimitado por una torre. El hombre a merced de sus fantasmas ¿es un arquitecto?
Estaba dibujando cuando le sobrevino el cansancio. El proyecto fantástico se realizaba bajo el imperio de la razón. O ¿acaso fue la razón, y su proyecto utópico, los que azuzaron los monstruos que, cuando se despertaron y alzaron el vuelo, le nublaron la vista y la razón y lo sumieron en el sopor?
En cualquier caso, el proyectista no pudo concluir el proyecto que la razón le dictaba. Los fantoches de la noche, alertados, lo impidieron. Quizá para bien.
Nota: el cuadro pertenece a una colección privada española.

Agradezco a la arquitecta Montserrat Domínguez el descubrimiento de esta obra.

2 comentarios:

  1. Hola Pedro: un cuadro estimulante, como todos los de Goya. ¿Alguien ha estudiado los espacios que Goya representaba? Muchos de sus cuadros representan arquitecturas interiores o exteriores ambiguas, como transiciones entre el adentro y el afuera. Los observo y no sé decir si los personajes están en un interior o en un exterior, de día o de noche, sanos o locos, libres o encerrados, tranquilos o inquietos.... son espacios frontera, ¿espacios purgatorios en oposición a espacios paraíso o infierno? ¿espacios ni buenos ni malos? ¿espacios sin premio ni castigo posible?...Son espacios lejanos de los coloridos campos madrileños de fiestas populares y de las oscuras pinturas de la Quinta del Sordo o desus grabados......... Muchos de sus cuadros están en el punto medio. ¿La condición humana vista como es sin la lente deformadora de la esperanza? Sería útil que alguien lo estudiará. Abrazos desde Bogotá. Jorge Raedó

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    1. ¡Muy cierto! Muchas gracias por la observación. Desconozco si se ha estudiado la obra de Goya desde el punto de vista de las cualidades espaciales. Para mí, sus espacios solían ser interiores, incluso cuando los personajes se desenvuelven al aire libre, unos interiores opresivos como en la conocida serie de pinturas dedicadas a las cárceles u hospitales de locos. Las matanzas del 2 y el 3 de mayo ocurrieron en las calles, representadas como si fueran espacios cerrados. No se me había ocurrido que presentaban un carácter fronterizo. Esperanza, desde luego, no suelen manifestar. Habría que investigar, tanto en sus imágenes cuanto en sus textos . Grqcias de nuevo

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